Por
Manuel Fernando López/Expediente.
Día de publicación: 2014-05-29
Día de publicación: 2014-05-29
Como les
prometí mis queridos lectores aquí viene la segunda parte del inombrable
prohombre como titulé mi columna anterior. Aquel pillo y dirigente en ese
entonces de la Asociación de Organismos Agrícolas del Norte de Sonora –Aoans- a
quien le incautaron en la frontera de Nogales, Arizona un contenedor con diez
toneladas de mariguana en greña y, seis de calabacitas, además de
llevar en la cabina del tracto camión un millón y medio de pesos para “lo que
hiciera falta”, denunciando el chofer después de presiones de las autoridades
aduanales de Estados Unidos que la carga inicial en realidad era de veinte
toneladas de mariguana en un semirremolque enganchado a la caja principal, que
pasó primero, al contratar como ya lo dije en mi columna anterior por medio de
una “burra” –nombre que se da a los camiones que pasan cargas de viajes con
remolque y semirremolques por las leyes de aquel país, que no permiten más que
el paso de un camión por contenedor—asimismo y si para los efectos de que mis
amables lectores no hayan logrado identificar a este rufián de la agricultura y
del narcotráfico, vaya, antes de termina r la columna a darles una media
filiación a ver si con esto, logran identificarlo.
Su
cabeza es redonda, cara ancha y mofletuda, símil perfecto del sociólogo y
criminólogo César Lombroso: su estructura facial es la confluencia entre un
indio guajiro de América del Sur y de un mongol de las estepas siberianas
de la Europa Asiática, su estructura ósea es baja, pero no tanto como la
del enano Santanón, es gordo, pero no tan panzón como el Sancho Panza del
Quijote….. ¿ya dio con el personaje o no?, entonces sigamos: tiene los
ojos claros como el mar, así como el Fausto de Goethe, pero su mirada no es
cálida ni cándida como la de aquel, más bien es una mirada retorcida y huidiza
por la ambición, la codicia, calumnia y, sobre todo por su capacidad para el
engaño y la traición.
¿Más
datos o se rinden?: el tipo no es histriónico como Carlos Ahumada, al
contrario, es de naturaleza y bajo perfil, siempre acomodándose a las
circunstancias, sobre todo cuando éstas le son favorables; por esto fue priísta
– presidente de la Junta para el progreso y Bienestar ,¡mira nomás!-- con
el entonces alcalde de Hermosillo Carlos Robles Loustanau mismo a quien
sacó del estado vía terrestre ya éste prófugo y, luego con Guillermo Padrés fue
su aliado y ferviente panista para la candidatura a la gubernatura del
Estado,--del “Memo” por supuesto --lo cual consta en diferentes diarios, donde
le daban el apoyo como organización agrícola.
Luego en
las “intermedias” hace lo mismo con Alejandro López Caballero, pero ahora
resulta que ha cabildeado y se ha acercado al círculo íntimo de Claudia
Pavlovich, para organizarle fiestecitas y darle todo su apoyo al
PRI—si, pero al de la Claudia—y, flaco favor le hacen este tipo de rufianes a
la imagen e integridad a toda prueba de “la guerita”.
Compañeros
de “mañas”, “coyotes de la misma loma”, “pájaros de la misma rama” , panistas
ambos , pero sobre todo magníficos para los negocios ilícitos, nuestro
personaje junto con el sombrío y tenebroso gordo, titular de Sagarpa estatal,
Héctor Ortiz Ciscomani, alias “El Bolonias”, seguramente irán en breve al pleno
del Congreso del Estado – uno como espectador—al ser requerido para rendir
cuentas del latrocinio y del saqueo impune que como funcionario ha cometido.
Esperemos
que después de la comparecencia no resulte igual que su compañero cuando
introdujo a Estados Unidos la droga y, vayan a catearle sus oficinas, los
militares y la PGR ya que los delitos porque se le acusan son malversación de
fondos federales, en donde también se benefició el sujeto del que a
continuación ¡¡ DAREMOS SU NOMBRE!!.
Tiene el
color de piel de los europeos del mediterráneo, el apellido de una bahía que se
encuentra a ciento diez kilómetros de Hermosillo hacia el poniente, ¿ya
supieron su nombre?
Desde
luego que si, ¿verdad?.
El
“prohombre” y gran rufián es nada menos que FAUSTO BAY ROGEL!!.
Esta
historia continuará, porque sus andanzas son largas, pero además le han sido
benéficas y placenteras. Alguien debería informarle que las facturas
vienen.